Hace mucho tiempo, en la edad media, las y los poetas se dieron cuenta de que sus letras podían tener música y así nació la Trova. Y quienes les ponían música a sus letras se llamaron Trovadoras y Trovadores, ¡algo así como las raperas y los raperos de hoy!
En Cuba, país de grandes poetas que también lucharon por un mundo mejor, como José Martí, nació un gran movimiento cultural que se llamó Trova Cubana, y que traspasó fronteras con sus canciones de revolución; esas canciones como disparos de flores hacia todo el mundo. La Nueva Canción, como la llama Silvio. Porque la canción está viva, es un animal o un fantasma. ¿Cuál canción? ¡Todas! ¡La que quieras, la que te guste! Es una guerrera en busca de un mundo nuevo, que se siente hasta los huesos. Es una energía que viene del cosmos para sacudir el esqueleto de la Catrina. Es la revolución de las almas. Es una invitación. ¿A qué? A pensar, disfrutar, amar, olvidar, recordar… pero siempre invita.
Así, como un viajero del cosmos, extraterrestre desvelado, vagabundo de mundos, saltimbanqui de planetas, en una nave interestelar que se mueve a la velocidad de la canción, llega Silvio a tus manos, a tus oídos y tu corazón. Es un mensajero. ¿Y cuál es el mensaje? ¡Vamos a descubrirlo!